MEDUSA F1
La Medusa es un híbrido F1 auténtico, creado a partir de líneas de marihuana endógamas puras. Ofrece unas características de crecimiento uniformes, aromas y sabores deliciosos y mucha potencia. Si quieres cultivar plantas estables y alargadas en tu jardín, cuarto o armario de cultivo, no busques más.
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Medusa F1: aromas deliciosos, gran potencia y plantas de tamaño medio
Aunque no te convertirá en piedra como la mítica diosa del mismo nombre, la Medusa F1 coloca mucho a su manera. Una combinación de genéticas de líneas endógamas derivadas de la Sugar Magnolia (una índica densa y dulce) y la American Beauty (un híbrido rápido y afrutado, muy apreciado por su efecto positivo y equilibrado), el resultado es una variedad F1 autofloreciente que ofrece un sabor fresco, un perfil cannabinoide único y cosechas abundantes.
Aromas, sabores y efectos de la Medusa F1: menta, pimienta y fruta fresca con un perfil cannabinoide equilibrado
La Medusa F1 es una variedad muy aromática con una alta concentración de terpenos que proporcionan notas de menta fresca junto con un fuerte toque especiado, y matices afrutados, ácidos y de combustible. Sus cogollos gruesos y escarchados producen de forma consistente altos niveles de THC y CBG, así como grandes concentraciones de mirceno, ocimeno, farneseno y cariofileno. Y como resultado, la Medusa F1 causa un efecto fuerte que relaja y coloca el cuerpo de la cabeza a los pies (propiciado por unas concentraciones especialmente altas de mirceno y farneseno), a la vez que inspira la mente con un subidón edificante, creativo e motivador (gracias a su contenido de ocimeno).
Cultivar Medusa F1: plantas altas pero manejables con cogollos pesados y fáciles de manicurar
Las semillas de la Medusa F1 producen plantas autoflorecientes estiradas, con ramas largas y fuertes y entrenudos bien espaciados. Estos ejemplares suelen alcanzar una altura máxima de 80-85cm, y tienen una floración rápida, de solo 42-45 días (72 días desde la germinación hasta la cosecha). Gracias a su genética, la Medusa F1 desarrolla muchas flores gruesas, con cálices grandes e hinchados que facilitan el manicurado. La Medusa F1 es una variedad muy estable, que tolera bien el estrés y las condiciones de cultivo desfavorables, pero puede ser un poco susceptible a la botritis, así que asegúrate de controlar la humedad de tu cuarto de cultivo o jardín.